La mejor dieta del mundo. Cuida tu cuerpo y tu mente.
Así que me he propuesto no ingerir ningún alimento, ya sea líquido o sólido, que sea dañino para mi integridad física (aunque he pactado conmigo mismo alguna que otra pequeña excepción…)
Me preocupo y ocupo de tomar mi cantidad diaria de Omega 3 y Omega 6 para mejorar la circulación sanguínea y de esa manera prevenir enfermedades cardiovasculares y el colesterol. Consumo semanalmente Salmón, Pipas de Calabaza y utilizo Aceite de Nuez para aderezar mis ensaladas.
También me suministro de Antioxidantes para paliar los nocivos radicales libres. Me encanta el Té Verde y el Blanco, así cómo el Zumo natural de Pomelo que yo mismo exprimo cada mañana, para aprovecharme de su Vitamina C, vital para combatir los efectos de los virus de la gripe que campan a sus anchas a mi alrededor.
He introducido en mi dieta la ingesta de Copos de avena y Proteína de Soja, ya sea en complemento alimenticio, cómo al natural, incorporándolo a mis recetas de cocina. Ayudándome cómo complemento la Lecitina E.
He cambiado mis hábitos de consumo de carne y embutidos, dejando de lado los productos porcinos y declinándome por los de origen vacuno y aves, a poder ser de granja.
He empezado a practicar deporte, cada vez que tengo ocasión. Así cómo Superman vestía bajo su traje y corbata su “uniforme de Superman” y se cambiaba en cualquier cabina telefónica, yo bajo mi “uniforme de trabajo” parece que lleve un chandal y en cuanto tengo alguna hora a última hora de la tarde o a primeras horas del día, me dispongo a practicar entrenamiento con pesas, IndoorWalking, Spinning, Tai Jitsu, o simplemente a golpear el saco de boxeo que he instalado en la azotea de mi casa.
Físicamente ya empiezo a notar los efectos. La ropa me queda mejor y me encuentro ágil y fuerte, además de haber perdido unos 8 ó 10 kilos.
¿Todo esto sirve de algo por sí solo, si no cambio mis hábitos de consumo mental?, ¿Qué pasa con mi salud mental o espiritual?
Me explico. No dejo que entren en mi cuerpo alimentos o productos nocivos para mi salud, pero ¿dejo que entren programas de televisión, argumentos, comentarios, conversaciones y demás “alimentos basura” en mi cerebro?
He decidido cuidar lo que escucho y lo que veo, al igual que mi dieta alimenticia, no quiero ensuciar mi mente con negatividad, chismorreos y problemas ajenos que no me incumben, ni que tienen nada que ver conmigo.
Así cómo hay cadenas de televisión que ya no veo, y ya sabrás a cual me refiero, hay conversaciones en las que no estoy presente, y si me pilla por sorpresa, abandono de inmediato.
He aprendido a decir NO a las chucherías y a los “alimentos” que no alimentan, y también he aprendido a decir NO quiero ver o escuchar esto.
No hay nada mas satisfactorio cómo decir: “mira este tema no me interesa, ni quiero escucharlo“, inmediatamente tu interlocutor se queda “a cuadros” y la próxima vez que tenga un chismorreo que contar buscará a otro que sí le dé pábulo al tema en cuestión.
En definitiva, será la edad, he decidido cuidarme por dentro y por fuera, pienso vivir por lo menos otros 45 años y quiero estar sano tanto física, cómo mentalmente, así que te invito a que sigas mi dieta, seguro que serás mas feliz y te encontrarás mejor; y realmente te preocuparás por lo que merece la pena de verdad.
Diego Gallardo
Diego Gallardo
🌐 Nómada Digital | 🚀 Emprendedor | 🏋♂ Fitness & 👨⚕ Nutrition Coach | 👨🏫 Formador de Formadores